Ford reconoce que pasar a ser totalmente eléctricos en 2030 en Europa no es una buena opción, ni para ellos ni para sus clientes
Ford ha escuchado a sus clientes, y estos dicen que apostar por una flota 100% eléctrica en 2030 “es demasiado ambicioso”. El foco está en los híbridos.
Ford afirma que el plan de la empresa de pasar a ser totalmente eléctrica para 2030 en Europa era “demasiado ambicioso”, y que la empresa seguirá ofreciendo una gama de híbridos en vista de la demanda y aceptación de los vehículos eléctricos.
“Los clientes han votado y han dicho que era demasiado ambicioso”
Marin Gjaja, director de operaciones de la división de electrificación del Modelo E de Ford, ha declarado al diario inglés Autocar que la compañía ya no planea dejar de vender coches de combustión en Europa en los próximos seis años, como dijo que haría en 2021, debido a la “incertidumbre” en torno a la demanda y la legislación de los VE.
“No creo que podamos apostar por nada hasta que nuestros clientes decidan que están de acuerdo, y eso avanza a ritmos diferentes en todo el mundo”, dijo el director. Asimismo, Gjaja citó la vacilante adopción de los vehículos eléctricos por parte de los clientes.
La clave de esto, según él, es debido a los elevados costes de las baterías, así como a la supresión de los incentivos públicos. Asimismo, esta es la principal razón, ya no sólo de la poca demanda de eléctricos, sino también de que los consumidores tiendan a prestar más atención a los híbridos, como es el caso del Puma, Focus y Kuga.
A la pregunta de si la empresa se estaba replanteando sus ambiciones de vehículos eléctricos para 2030, Gjaja respondió: “Creo que los clientes han votado y nos han dicho que era demasiado ambicioso, eso es lo que yo diría, y creo que todo el sector lo ha descubierto por las malas. También diría que la realidad te obliga a ajustar tus planes”.
“No creemos que ser totalmente eléctricos de aquí a 2030 sea una buena opción para nuestro negocio ni, sobre todo, para nuestros clientes”, añadió. Independientemente de sus planes de seguir ofreciendo modelos con motor de combustión interna después de 2030, Ford sólo podrá vender coches eléctricos en el Reino Unido.
Esto se debe al plan del nuevo gobierno laborista de reinstaurar en 2030 la prohibición de vender nuevos coches con motor de combustión. Ford presentó recientemente el nuevo Capri como su tercer turismo eléctrico para Europa, tras el Mustang Mach-E y el Explorer, e introducirá versiones eléctricas del Puma y el Tourneo Courier el año que viene.
"Vamos a competir de forma agresiva"
A mediados de 2025, el Focus se unirá al Fiesta en la jubilación, dejando al Tourneo, Mustang, Puma y Kuga como los únicos coches de combustión de la marca a la venta. Pero Gjaja dijo que mantener una oferta flexible de motores es crucial, y que una nueva plataforma “multi-energía” actualmente en desarrollo para coches europeos será vital para asegurar que Ford mantiene su posición en el mercado europeo de coches convencionales.
La compañía no ha esbozado completamente el futuro de su fábrica de Valencia más allá del final de la producción de la actual generación del Kuga, pero ha revisado sus planes de fabricar allí vehículos eléctricos en favor de modelos que podrían ser propulsados (al menos, en parte) por motores de combustión.
“Vamos a competir de forma agresiva, ya sea con un vehículo de combustión interna pura, con un vehículo eléctrico de batería pura o con híbridos intermedios, porque lo que estamos viendo es que los clientes quieren tener la libertad de elegir el sistema de propulsión y el vehículo adecuados para su caso de uso”, aseguró Gaja.
“Vamos a traer algo a Valencia, pero aún no nos hemos comprometido. Todavía estamos trabajando en ello. Creo que será multienergético. Esa es nuestra idea actual, porque creemos que nos da la mejor oportunidad de éxito dado el mercado europeo y dónde estamos en adopción”, añadió.
Una nueva estrategia
Está previsto que la producción del primer modelo sobre esta nueva plataforma (cuyo tamaño y diseño siguen sin confirmarse) comience en 2027, con volúmenes previstos de hasta 300.000 unidades al año, según el Ministerio de Industria español.
Es posible que Ford planee poner en línea una nueva generación del Kuga, ya que se espera que ese coche termine su ciclo de vida actual en torno a 2026. Asimismo, cabe señalar que Ford retrasó una inversión sustancial en la planta de Valencia en 2022, citando una revisión de las perspectivas económicas para Europa.
En su lugar, dio prioridad a la remodelación de su antigua fábrica de Fiesta en Colonia, Alemania, para permitirle construir el Explorer y el Capri EV. Por su parte, recientemente, la empresa ha llevado a cabo importantes recortes de plantilla en la planta española, anunciando la supresión de 1.100 puestos de trabajo el año pasado.
Asimismo, en mayo de este año revelando planes para suprimir otros 1.600 puestos, aunque ha sugerido que podría reincorporar 1.000 de estos puestos en línea con un aumento previsto de la producción a partir de 2027.
Gjaja afirma que es difícil consolidar una estrategia de inversión en el contexto del mercado actual, ya que no está claro cuándo se producirá la demanda real de coches eléctricos en consonancia con el marco legislativo y normativo que los regula.
“Nos lo pone difícil a todos los fabricantes, porque las inversiones no son triviales”, dijo. “Pero ahora mismo, sentimos que tenemos que estar invirtiendo en todos ellos, mientras esperamos, fundamentalmente por la incertidumbre de cómo se va a desarrollar esto”.
No obstante, sigue confiando en que “acabaremos con una flota altamente electrificada, quizá en última instancia completamente electrificada si conseguimos que los costes de las baterías y la densidad energética sean los adecuados”. Pero, puntualiza: “Ese es un destino, ¿dentro de 10 o 30 años? No creo que la bola de cristal de nadie sea lo suficientemente buena para decirlo”:
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Etiquetas: Unión Europea
