¿Qué puede pasar con el coche eléctrico si Kamala Harris es elegida como Presidenta de los Estados Unidos?
Joe Biden ha anunciado que dejará la presidencia de los EE.UU., y Kamala Harris podría ser la futura elegida. ¿Cómo afectará a la industria del coche eléctrico?
Esta última semana ha sido de lo más caótica en Estados Unidos. Por si no lo sabes, Donald Trump, expresidente de los Estados Unidos, se ha presentado como candidato republicano a las elecciones de América de noviembre, justo después de vivir un intento de asesinato.
Pero no sólo eso, sino que Joe Biden, actual presidente de los EE.UU., ha anunciado que dejará la presidencia y, por ende, la Casa Blanca. Y ahora es la vicepresidenta, Kamala Harris, la que podría llegar a ser la candidata a la presidencia del Partido Demócrata estadounidense.
Ayer mismo Joe Biden dijo en una publicación en redes sociales: “Ha sido el mayor honor de mi vida servir como su Presidente. Y aunque mi intención ha sido buscar la reelección, creo que lo mejor para mi partido y para el país es que me retire y me centre únicamente en cumplir con mis obligaciones como Presidente durante el resto de mi mandato”.
Desde luego que no se han dejado nada más por el camino. Aunque sí queda algo más por comentar y es, en este caso, el futuro del coche eléctrico en Estados Unidos, ya que éste podría vivir un cambio drástico en función de los resultados de las urnas. Te lo contamos.
Donald Trump contra los coches eléctricos
Joe Biden ha anunciado que no seguirá más en la presidencia, y es por esto por lo que podría facilitarse la llegada a la presidencia a Donald Trump. Pero, como decimos, también se ha puesto el foco en la actual vicepresidenta, Kamala Harris.
Pese a que quedan aproximadamente cuatro meses para las elecciones (5 de noviembre de 2024), muchas personas ya ven a Trump como el futuro presidente. Pero hay una cuestión que resulta casi irónica: uno de los mayores apoyos de Trump es Elon Musk, CEO de Tesla, y Trump no se muestra a favor de los coches eléctricos.
De hecho, Musk aporta más de 45 millones de dólares mensuales a la campaña de Donald Trump pese a que, como decimos, el candidato republicano no muestra interés alguno por el coche eléctrico y por ofrecer ayudas a la electromovilidad en Estados Unidos.
Ayer mismo hablamos sobre esto en un artículo sobre la presidencia de Trump y su opinión acerca del coche eléctrico. Recientemente, en un discurso que se celebró en Milwaukee durante la convención republicana, Trump dijo: “Pondré fin al mandato de vehículos eléctricos el primer día, salvo así la industria automovilística estadounidense de la destrucción total y ahorrando a los clientes miles de dólares por coche”.
Tras estas líneas hay un agente bastante importante: las petroleras. Y es que, aunque la campaña de Trump esté apoyada por Elon Musk, magnate y CEO de Tesla, las petroleras también financian la campaña del repubblicano.
Y es por esto mismo por lo que Trump se ha referido a las actuales ayudas a la compra de coches eléctricos como un “increíble despilfarro” de dinero. Dichas ayudas se enmarcan en la Ley de Reducción de la Inflación del Presidente Biden, de tal manera que otorgan una reducción de hasta 7.500 dólares por coche eléctrico en el IRPF.
Esto es algo similar a lo que encontramos en España, es decir, el Plan MOVES III. Pero Trump, precisamente, quiere acabar con todo esto. El candidato a la presidencia ha anunciado que se encargará expresamente de eliminar toda norma que prohíba la venta y circulación de coches con motores de combustión interna.
Y no sólo eso, sino que ya ha dicho en repetidas ocasiones que cree que no es más que un mercado que favorece a China, y no a Occidente. Es por esto mismo por lo que, dentro de las actuales normas que figuran en su partido republicano acerca de los VE, hay una que dice:
Los coches eléctricos “no podrán tener ningún componente de la batería fabricado o ensamblado por entidades extranjeras de interés”, lo cual se refiere a países como China, Rusia o Corea del Norte. Pero, ¿y qué podría pasar con el coche eléctrico si Kamala Harris alcanza la presidencia?
El posible futuro de los coches eléctricos con la presidencia de Kamala Harris
Después de que Joe Biden anunciase su retirada de la presidencia de los Estados Unidos, el sorprendente anuncio fue seguido rápidamente por un post de apoyo a la vicepresidenta Kamala Harris como nueva candidata presidencial.
De hecho, está recogiendo apoyos rápidamente y la UAW (sindicato United Auto Workers), ha sido uno de los primeros en manifestar su respaldo. En un comunicado, el sindicato agradeció a Biden su “liderazgo” y su “increíble mandato”.
Biden fue el primer presidente que se unió a un piquete en la huelga contra General Motors. A continuación, el sindicato destacó el hecho de que “la vicepresidenta Kamala Harris recorrió la línea de piquete con nosotros en 2019”. Es decir, si bien apoyan a Biden, también lo hacen a Harris.
Por su parte, la UAW criticó a Donald Trump por “mentiras sobre la reconstrucción de la industria automotriz”. El sindicato afirmó entonces que “mientras él estaba en el cargo, los trabajadores del automóvil en Lordstown fueron dados por muertos por GM en 2019 mientras él decía y no hacía nada”.
Sin embargo, esto no parece ser del todo cierto, ya que en marzo de este mismo año, Trump publicó un tuit en el que decía: “Acabo de hablar con Mary Barra, CEO de General Motors sobre la planta de Lordstown Ohio. No estoy contento de que esté cerrada cuando todo lo demás en nuestro país está BOOMING”.
“Le pedí que la vendiera o que hiciera algo rápidamente. Le echó la culpa al sindicato UAW. ¡No me importa, sólo quiero que se abra!”, añadió. En cualquier caso, con Harris como candidata demócrata, hay muchas preguntas sobre lo que podría suponer para la industria del automóvil si resulta elegida.
Lo más probable sería una continuación de las políticas progresistas que favorecen a los sindicatos y a los vehículos eléctricos. De hecho, Harris ha participado en la “Economic Opportunity Tour” (Gira de Oportunidades Económicas), en la que visitó Detroit para promover nuevos fondos y recursos para los fabricantes de automóviles.
Esto incluye hasta 100 millones de dólares en subvenciones del Departamento de Energía, así como otras grandes iniciativas. Por ende, en caso de que Kamala Harris saliese victoriosa en las elecciones del próximo 5 de noviembre, podríamos esperar algunas de las siguientes iniciativas:
La industria del coche eléctrico podría experimentar varios cambios significativos basados en las políticas y prioridades que ella ha apoyado en el pasado. En primer lugar, es probable que su administración continúe y posiblemente amplíe los incentivos y subsidios para la compra de vehículos eléctricos, haciendo que estos sean más accesibles para el público general.
Este apoyo financiero podría fomentar un mayor interés y adopción de los coches eléctricos entre los consumidores. Además, se espera una inversión significativa en la expansión de la infraestructura de carga para vehículos eléctricos. Esto incluiría la instalación de más estaciones de carga rápida a lo largo de las carreteras y en áreas urbanas, así como incentivos para que los hogares y las empresas instalen cargadores.
Mejorar la disponibilidad y conveniencia de los puntos de carga podría eliminar una de las barreras principales para la adopción masiva de vehículos eléctricos. En términos de regulaciones, podrían implementarse normativas más estrictas sobre las emisiones de los vehículos a gasolina y diésel.
Estas nuevas regulaciones incentivarían a los fabricantes a acelerar la producción y desarrollo de coches eléctricos, alineándose con los objetivos de reducción de emisiones de carbono. Al mismo tiempo, una administración liderada por Harris podría aumentar la financiación para la investigación y desarrollo de tecnologías relacionadas con los VE incluyendo baterías de mayor duración y métodos de reciclaje de baterías.
La administración también podría enfocarse en asegurar una transición justa para los trabajadores de la industria automotriz tradicional. Esto implicaría promover programas de capacitación y reconversión laboral para que los trabajadores puedan adaptarse a la producción de vehículos eléctricos, mitigando así el impacto económico en las comunidades dependientes de la manufactura de vehículos convencionales.
Finalmente, es probable que Kamala Harris fortalezca la cooperación internacional en materia de cambio climático y tecnología verde, lo que podría incluir acuerdos para la producción y distribución de vehículos eléctricos a nivel global. Este enfoque colaborativo podría abrir nuevos mercados y oportunidades para los fabricantes de vehículos eléctricos estadounidenses.
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Etiquetas: Donald Trump, Estados Unidos