Cinco virtudes y dos defectos del Fiat Grande Panda
Vuelve un clásico de los 80, transformado en un coche eléctrico moderno, pero cargado de detalles que evocan al original. Te mostramos cinco virtudes y dos defectos del Fiat Grande Panta.
El Panda está de vuelta. La marca italiana presentó hace poco su esperado coche eléctrico que se ubicará en esa nueva categoría que se está creando, de modelos a baterías más asequibles, con un precio por debajo del umbral de los 25.000 euros. En esta ocasión, vamos a mostrarte cinco virtudes y dos defectos del Fiat Grande Panda.
El nuevo Fiat Grande Panda es el primogénito de la nueva familia inspirada en el Panda clásico, diseñado por Giorgetto Giugiaro y que revolucionó en concepto de vehículo utilitario a principios de los 80.
Igual que hizo aquel, el nuevo Grande Panda es un coche familiar compacto que responde a las necesidades de los clientes actuales y es el encargado de estrenar la plataforma global y multienergética STLA Smart de Stellantis, iniciando la transición de Fiat hacia una producción global.
Diseño, una de las virtudes del Fiat Grande Panda
Si hay algo que saben hacer muy bien los italianos es diseñar coches, salvo raras excepciones. Y también saben reinterpretar muy bien sus iconos del pasado. Ya lo vimos con el Fiat 500 y ahora repiten la misma receta con el Fiat Grande Panda.
Luce un diseño en forma de cuña gracias a sus pronunciadas líneas de perfil, que evocan claramente al Panda clásico. El aspecto es el de un coche robusto, con una sutil combinación de líneas estructuradas y superficies suaves y atrevidas que enfatizan los marcados pasos de rueda.
Es en la vista de perfil donde se aprecia mejor esa reminiscencia al pasado, con una silueta que evoca la fuerza del Panda de Giugiario, como se ve en sus líneas y en el diseño del pilar C, a lo que hay que añadir el nombre Panda impreso tridimensionalmente en bajorrelieve en las puertas, en homenaje al Panda 4x4.
Interior amplio y funcional
Esas formas cuadradas inspiradas en el Panda clásico de los 80 ayudan a configurar un interior bastante espacioso, teniendo en cuenta que hablamos de un coche de 3,99 metros de longitud.
Fiat ha prestado especial atención a la optimización del espacio, que se ha utilizado de forma inteligente. Como ejemplo de esto, cabe destacar el espacio de almacenamiento disponible en el salpicadero, con un total de 13 litros, de los cuales, tres litros se encuentran en un solo compartimento.
Se trata de una solución sencilla e ingeniosa, que recuerda al atemporal salpicadero ‘de bolsillo’ del Panda original y permite una gran variedad de opciones a la hora de guardar objetos.
Un salpicadero que, por cierto, presenta un estilo único, con un marco de policarbonato que evoca la forma de la pista de Lingotto, en el que se integran la instrumentación digital de 10' pulgadas y la pantalla de 10,25 pulgadas del sistema multimedia.
Maletero
Una de las virtudes del Fiat Grande Panda, sin duda, es la capacidad de su maletero. La marca italiana anuncia un volumen de carga de 361 litros. Es una cifra extraordinaria para un vehículo que no llega a los cuatro metros de longitud.
Normalmente, los coches de este tamaño ofrecen unos 300 litros o menos, así que el nuevo utilitario italiano se convertirá en uno de los mejores de su categoría.
Disponible en híbrido y eléctrico
El nuevo Fiat Grande Panda estará disponible en dos versiones, una híbrida y otra totalmente eléctrica, ajustándose a todo tipo de necesidades. Empezando por la primera, probablemente sea la misma que empleará el nuevo Citroën C3.
Se trata de un motor de gasolina de 1.2 litros y otro eléctrico de 29 CV que puede mover el coche a velocidades muy bajas. Produce 101 CV y se combina con una caja de cambios automática de doble embrague ë-DCS6 de seis marchas.
En cuanto al eléctrico, tiene un motor de 83 kW (113 CV) y una batería de 44 kWh que le proporciona más de 320 kilómetros de autonomía en el ciclo combinado WLTP, si bien este dato es provisional y aún está en proceso de homologación. También es el mismo esquema mecánico del Citroën ë-C3.
Cable de carga en espiral integrado
Un detalle que no pasa desapercibido en el nuevo eléctrico italiano es su cable de carga en espiral integrado en el frontal, una solución innovadora que aparece, por primera vez en el mercado, en el Grande Panda.
Este cable funciona en corriente alterna hasta 7 kW y tiene un alojamiento especial bajo el capó, lo que permite ahorrar espacio en el maletero y favorece su uso práctico en el día a día, ya que es fácil de manejar y evita la suciedad de los cables tradicionales.
Su funcionamiento muy sencillo: tras abrir la tapa, se saca el cable y se conecta a la estación de carga. Cuando termina la operación de carga, se recoge fácilmente en el compartimento, gracias a la forma en espiral del cable.
Primer defecto del Fiat Grande Panda: la autonomía
Todavía quedan muchos detalles por conocer del Fiat Grande Panda, pero el primer defecto que destacamos es la autonomía. Esos 320 kilómetros anunciados se antojan pocos y lo convierte en un coche para uso exclusivo de ciudad, que es su cometido, pero impide plantearse un viaje largo, como sí se puede con un coche equivalente de combustión.
Igual que ocurre con el ë-C3, es probable que la gama se complete más adelante con una opción menos potente y con una batería más pequeña, que proporcione una autonomía de unos 200 kilómetros. Al menos, quien necesite cubrir mayores distancias tendrá la versión híbrida.
Segundo defecto: el precio
El segundo defecto lo ligamos con el primero. Fiat ha confirmado que la versión totalmente eléctrica tendrá un precio de partida inferior a 25.000 euros.
Este es el nuevo umbral que delimita el coche eléctrico ‘barato’ del resto, pero sigue siendo un precio elevado, teniendo en cuenta que se trata de un vehículo del segmento B con el que, en condiciones reales, se podrán recorrer menos de 300 kilómetros.
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Etiquetas: Utilitarios
