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VÍDEO: Lotus Emeya 2025, un rival directo del Porsche Taycan y el Tesla Model S

Redacción AUTO BILD

“Lotus” significó en su día construcción ligera, leyenda de la Fórmula 1, Colin Chapman… en definitiva, bólidos como el Elise. Y ahora, ¿qué?

Lotus Emeya 2025, un rival directo del Porsche Taycan y el Tesla Model S. “Lotus” significó en su día construcción ligera, leyenda de la Fórmula 1, Colin Chapman… en definitiva, bólidos como el Elise. 

Esos tiempos han quedado atrás, pero igualmente, cuando el grupo chino Geely se hizo al mando de la firma británica, se planteó que Lotus fuera su marca para entusiastas, pero menos de nicho, y lo ha posicionado entre competidores de mayor volumen como Porsche.

Atacaron a los alemanes con su primer SUV eléctrico de altísimo rendimiento, y ahora vuelven a la ofensiva con el Emeya, claramente dirigido a la línea de flotación del Taycan. Solo que este es mucho más futurista, empezando por el frontal.

Es muy poderoso, y presume de carbono en el capó y el techo, y para mejorar la aerodinámica usa cámaras en lugar de espejos retrovisores, como ya conocemos del Audi e-tron. Y el conjunto tiene poco que ver con lo que hacía Lotus hace años: 5,14 metros de largo para este cinco plazas, con una batalla de 3,70, de modo que puedes sentarte muy aireado detrás, mejor que en el Taycan, por cierto.

Lotus Emeya

Pero hablamos de un coche con más de 900 CV, por lo que no me interesan nada las plazas traseras, sino el asiento de delante a la izquierda. De modo que entro ya para nuestra primera ronda al volante del Lotus Emeya.

Por supuesto, esto va principalmente de rendimiento y prestaciones, no en vano, Lotus quiere competir con el Taycan. Pero no podemos pasar por alto el lujo, la tecnología y los asistentes. Y es en estos apartados donde los chinos empiezan a sacar músculo. 

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De entrada tenemos una pantalla gigante que flota sobre la consola central, aunque frente al conductor y el acompañante hay sendas pantallas pequeñas, y otras dos en las puertas para los espejos retrovisores con cámara que conocemos de Audi.

Hay que acostumbrarse, pero queda muy tecnológico. Tengo además asientos de cuero generoso, por supuesto climatizados y con masaje, y ayudantes electrónicos para todo lo que imagines. La impresión general es buenísima, y no tiene nada que ver con los acabados precarios que conocíamos de modelos chinos anteriores, sino que todo se ve y siente en la liga de Porsche, pero con una diferencia: el Lotus es más barato.

Lotus Emeya

En prestaciones, el Emeya también mantiene el tipo frente al Taycan. Hay dos variantes, las dos con tracción total, pero una con 612 CV y la otra con 918, capaz de pasar de 0 a 100 en 2,8 segundos y una punta de 256 km/h.

No puedo dejar de pensar cómo sería probarlo en Nordschleife, y plantar cara al mejor tiempo logrado por el Taycan Turbo GT, y tal vez superarlo. Ya lo veremos. Donde sí que es mucho más rápido el Emeya es en el punto de recarga, aun cuando los alemanes han añadido más potencia de carga recientemente.

Aquí tenemos una batería con una capacidad de 102 kWh, lo que permite autonomías oficiales de 610 o 485 kilómetros según la versión, que trabajan, igual que en el Taycan, con un sistema de 800 voltios, pero con una potencia de carga de hasta 350 kW, lo que significa pasar del 10 al 80% en 18 minutos. 

Sin duda, esto facilita mucho planear un viaje, siempre, claro, que encuentres puntos de carga con estas capacidades. Y no, ahora no os voy a hablar de comportamiento en curva ni aceleración, sino de carga. Estoy en un punto de carga rápida al que he llegado con el coche al 22%. Ahora estamos al 27% en pocos segundos, de modo que queda claro que estamos cargando rápido comparativamente.

Lotus Emeya

Vamos con 350, 355, 356 y 358 kW, y ya estamos al 41%, con un resto de carga de 27 minutos, esto para una batería de 102 kWh. De entrada, no me viene a la cabeza otro coche que sea capaz de algo así. Sin duda, supera al Porsche Taycan y al Audi e-tron GT, que llegan a 320 y 325 kW, pero ahora en este coche estoy a 353, 354 y 356 kW. Sin duda, el Emeya es el campeón en el punto de carga.

Pues vengo de la parada de carga y en apenas media hora he llenado la batería al 100%, hablamos de un 74%, por tanto, 75 kWh en menos de 30 minutos, lo que es realmente impresionante. De modo que podemos hablar de un deportivo viajero, esto es, el Emeya es un Gran Turismo, y como tal se comporta: es ágil y confortable, y los asistentes no son muy intrusivos.

Según el modo de conducción, puede ser muy directo y preciso, con un gran aplomo en todo momento, o variar en los modos Confort y Touring a una reacciones más suaves. Especialmente si cambias de Sport a Touring, notas que pisa de una forma mucho más confortable.

Pero todo esto en autopista: estamos en los Alpes, y ahora voy a tomar una carretera revirada, donde antes un Lotus se sentía como en casa, miles de curvas delante de mí para comprobar cómo baila este Emeya. Hablamos, os recuerdo, de un coche de 5 metros y dos toneladas y media.

Lotus Emeya

Pues aquí estoy, en una carretera de montaña, para comprobar si este Lotus mantiene el comportamiento que convirtió la marca en un clásico de los deportivos con modelos como el Elise. Pero claro, hablamos de tres veces más peso, de 1,50 metros más de longitud y una posición de asiento que por supuesto nada tiene que ver con la del Elise.

Y claro, me siento mucho más elevado, y donde el Elise reaccionaba de manera tan directa e intuitiva, aquí interviene mucha electrónica, como la servodirección o la suspensión adaptativa. Todo esto reduce el contacto directo con el asfalto, pero a cambio tenemos una potencia a años luz y un par motor más elevado todavía: 985 Nm, en el tope de gama, lo que convierte un adelantamiento en un juego de niños.

Pero el enorme peso sigue ahí y esto implica que el coche tiende al exterior de la curva, y eso requiere más trabajo para mantener la trayectoria ideal. Con todo, el Emeya es muy manejable y permite mucha diversión al volante en carreteras de montaña, y no solo en amplias autovías.

Como he dicho, no se puede comparar con un Elise y ese tiempo ya pasó, ahora estamos ante un concepto de coche completamente distinto. Y lo único que echo de menos es que, al pasar por un túnel, donde el motor de combustión de excitaba lo tímpanos hasta el éxtasis si abrías las ventanillas o llevabas la capota abierta, aquí tenemos absoluta tranquilidad.

Lotus Emeya

Hemos perdido emoción, pero aún así, debo decir que Lotus, con su Emeya, ha hecho un gran trabajo en cuanto al comportamiento por carreteras de curvas. Aunque sea mínimo, algo del espíritu Elise queda aquí, y eso es decir mucho en un coche eléctrico.

Pues esta ha sido la primera vuelta con el Lotus Emeya, y espero que no sea la última. Demuestra que la electromovilidad también puede ser apasionante y, aunque tiene poco que ver con un Elise, mientras que con el icónico roadster apenas podías circular por autovías, este Emeya es un auténtico viajero con tiempos de carga muy cortos, y capaz de proporcionar una diversión increíble en carreteras como estas de los Alpes.

Es sorprendente que un coche de casi 5,20 metros y más de 2,5 toneladas pueda rodar tan ágil por las curvas. No sabemos todavía los precios oficiales, pero sí sabemos que comparado con el Porsche Taycan, el Lotus Emeya será casi un chollo. Y si miramos a las antiguas cifras de matriculación y producción del Elise, queda claro que Lotus va por el camino correcto: ha salido de su nicho de mercado a otro de mayor volumen, y si sigue así, va a ser un durísimo competidor para Porsche y otras marcas similares.

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Etiquetas: Vídeo, Motor