Logo Autobild.es

El coche híbrido enchufable que tiene 2.400 km de autonomía

BYD Seal 06 DM-i

Y cuesta menos de 13.000 euros.

En 2024 los fabricantes de automóviles parecen haber llegado a una conclusión conjunta: es demasiado pronto para los coches eléctricos, que no tienen una aceptación suficiente como para apostarlo todo por ellos de momento, así que han retrasado sus planes en torno a los modelos de cero emisiones.

Esto ha llevado a muchos a llegar a otra conclusión: va a haber un periodo de transición entre los modelos térmicos y los eléctricos más largo de lo esperado, y durante esta etapa los que van a tener una importancia capital van a ser los coches híbridos enchufables (PHEV).

Sin embargo, en este campo, como ocurre un poco con los eléctricos, son las marcas de coches chinos las que están ganando la partida a los fabricantes europeos, japones y estadounidenses de toda la vida. Bueno, quizá “marcas” en plural sea exagerado, pero al menos hay una que se ha anotado un punto importante a este respecto: BYD.

La firma china, que empezó su andadura en el Viejo Continente exclusivamente con coches eléctricos, ha visto el panorama en distintos países europeos y ya ha empezado a vender también por aquí su primer PHEV, el BYD Seal U DM-i

 

Pero no solo eso, la compañía también ha anunciado que está trabajando en una nueva generación de híbridos enchufables que, gracias a su tecnología avanzada, cogen lo mejor de ambos mundos (térmicos y eléctricos), para conseguir arrojar autonomías conjuntas de más de 2.000 kilómetros.

Se trata del sistema híbrido de nueva generación DM5.0 +, que en el pasado Salón del Automóvil de Pekín se presentó en dos modelos distintos, el Qin L y el Seal 06, ambas berlinas que en su mercado doméstico tendrán un precio de menos de 13.000 euros al cambio actual, una tarifa imbatible teniendo en cuenta lo que ofrecen (aunque en Europa serán más caros).

A nivel de rendimiento, el sistema combina un motor de gasolina 1.5 atmosférico con un bloque eléctrico, logrando una potencia conjunta de 120 kW, es decir, unos 163 CV. Esto se complementa con una batería de solo 10,08 kWh de capacidad y con un depósito de combustible con un volumen de 65 litros.

Con dicha hoja de presentación cuesta creer una autonomía total como la anunciada, especialmente por el comedido tamaño de la batería, pero la marca ha llevado a cabo un test que ha sorprendido por no solo alcanzar la distancia prometida, si no superarla con creces, algo que se debe principalmente a la gran eficiencia del sistema.

En el vídeo que hay a continuación podéis verla, aunque si no sabéis chino, de poco os vais a enterar:

Por eso, mejor os lo resumimos nosotros. Para que la prueba fuera real, se cargó la batería y se llenó el depósito, tras lo que se selló la tapa tanto de la primera como del segundo. Se puso el coche en modo ECO, la frenada regenerativa estaba en modo estándar y el climatizador tenía la temperatura a 23 grados.

Empezaron una ruta que, en términos generales era más de bajada que de subida, lo que ayudó, pero a pesar de ello lo conseguido tiene mucho mérito: cuando el coche se paró habían recorrido 2.400 km, les quedaba un 4% de la batería y el consumo registrado era de solo 2,4 l/100 km.

Conoce cómo trabajamos en Autobild.